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viernes, 25 de enero de 2019

LA DEMOCRACIA EN LA QUE CREO

Venezuela vive en estos momentos una fuerte crisis por la frustración que genera la imposibilidad de contar con los alimentos, medicamentos, transporte, seguridad… sumado a los efectos de una mega inflación que devora los mermados ingresos.

Estamos atravesando una noche oscura, como diría Thomas Moore en su  El libro Las noches oscuras del alma, título que tomó del místico, poeta y hombre de fe, San Juan de la Cruz. En su libro enfatiza que todos hemos pasado por momentos difíciles, personales y sociales en nuestra vida. Tendemos a ver estas noches oscuras como obstáculos que hay que superar rápidamente. Moore nos invita a detenernos para extraer los grandes dones y revelaciones que estos momentos encierran.
Es viajar por la oscuridad para encontrar cuál es el sentido de la vida. Puede sonar etéreo; pero es la noche la que nos permite escuchar las voces silentes del alma y la que no nos permite ver más allá es la luz que encandila los eufemismos, ilusionismos que venden una realidad que responde  a intereses, necesidades, de que quienes  ejercen y ostentan poder.
La sombras de la democracia
Sabemos que la sombra es la alcoba de  la oscuridad   donde la luz  se obstaculiza o esconde. Es ese espacio que nos persigue, detrás de lo  que se presenta lumínico, engañoso por lo que oculta, pero que puede ser  muy revelador si lo afrontamos racionalmente.
La  democracia es  una forma de gobernar  en la que las decisiones colectivas son adoptadas por el pueblo mediante mecanismos de participación directa o indirecta que confieren legitimidad a sus representantes y cuyo objetivo es contar con instituciones orientadas a garantizar y proteger las libertades personales frente a los abusos del poder político o de terceros.
Surge la pregunta: ¿Venezuela con qué sistema  de gobierno cuenta?
La dictadura es una forma de gobernar que niega la oposición, que concentra el poder  y  que controla los cuatro «poderes»: ejecutivo, legislativo, judicial y mediático, pese a que se presenta con la fachada de democrático.
Se  asume como poseedor de la verdad o pensamiento único que se empeña en imponer con mecanismos de manipulación, chantaje, condicionamientos. Su principal aliada es la demagogia. Una estrategia que utiliza para conseguir el poder político y social. Se vale  de las creencias, prejuicios, miedos y desesperanza de sus seguidores para generar dependencia y apoyo popular. Utiliza la verborrea, la desinformación, los eufemismos con  palabras que esconden, maquillan o barnizan lo que en el fondo se quiere imponer.  Utiliza la propaganda, victimización, amenazas y condicionamientos para intimidar y coartar libertades.
La democracia en la  que creo
La que se aprende en la casa. Cuando permitimos a nuestros hijos desde sus primeros años opinar, tomar decisiones, equivocarse y aprender de los errores, a ser críticos y decir no  cuando estén en desacuerdo, a asociarse, exigir sus derechos y cumplir con sus responsabilidades.
La que se expresa en las aulas. Cuando los estudiantes pueden participar,  crear,  proponer, decidir, cuestionar, sentirse escuchados y que puedan  asumir las consecuencias de sus actos, con posibilidades para poner en práctica la empatía, la compasión, la solidaridad. Una educación en la que los valores se reconozcan y no los envuelva la sombra como: por ejemplo: confundiendo solidaridad con complicidad, respeto con obediencia, tolerancia con resignación, ser pacifico con ser pasivo…
La que vivimos como sociedad. Cuando pasamos de  ser habitantes a ciudadanos, con derecho a elegir, participando en la toma de decisiones, exigiendo y expresándonos sin temor a que se ponga en riesgo la libertad y la integridad, asociándonos para protestar pacíficamente. No permitiendo que nuestra dignidad deba negociarse o se carnetice con los grillos del populismo que somete emocionalmente imponiendo lealtades proselitistas e incuestionables a cambio de condicionados beneficios.
La justicia como norte. Con instituciones que garanticen los derechos, con mecanismos eficientes y suficientes para evitar la impunidad, la corrupción, la discriminación en sus distintas formas, xenofobia, homofobia, racismo.
La que nos haga reaccionar para que el 23 de enero de 1958 no sea una fecha más en el recuerdo de una reacción cívico-militar en que se derrocó la dictadura, sino un llamado a que nos interpele examinando: ¿Cuál es la democracia en la que creo y estoy dispuesto a defender?
Hasta la próxima resonancia

VIOLENCIA EN LAS PANTALLAS

Ahora que comienza el período vacacional los estudiantes tendrán mucho tiempo libre con pocas opciones para la recreación y el esparcimiento. Las tecnologías serán las encargadas de llenar esos vacíos.

Sabemos que se utilizan los celulares, internet, salas de chats, Facebook y otras redes sociales para “hacer una broma” sin darse  cuenta del daño que se puede ocasionar cuando esa información, que puede que sea verdadera o inventada, se hace pública, generando graves consecuencias.
En otras ocasiones  las  pantallas son utilizadas para vengarse por  situaciones personales, pasionales, celos, envidias, rivalidades con comentarios que  se publican  para desprestigiar y ofender públicamente.
Es importante  hacerles saber que toda la información que publicamos por internet, celulares, Facebook, Whatsapp u otras redes sociales después que se difundan sin posibilidad de control; ocasionando daños graves que pueden afectarnos o afectar a otros, psicológica, moralmente e inclusive poner en riesgo nuestras vidas o las de otros.
Hay ciberdelincuentes que se valen de internet para ganar su confianza y afecto, propiciando el acercamiento para luego abusar sexualmente, valiéndose de imágenes, videos, fotos que utilizan para extorsionar  y obtener dinero a cambio.
Utilizan como estrategia hacer ofertas engañosas, haciéndose pasar por academias de modelaje, productoras de castings para cuñas de televisión, concursos de belleza y de esta forma  engañan a quienes  convierten en sus víctimas.
¿Qué podemos hacer?
Utilizar de manera adecuada las tecnologías. Eso significa conocer todas sus ventajas; pero también sus riesgos. Se puede navegar junto a los hijos para hacer  uso adecuando de estas  herramientas. Recordarles  que navegar por internet es como salir a la calle. Hay  que tener  cuidado por dónde transitar, con quién nos relacionarnos, cómo  y con qué nos recreamos, qué lugares visitar  y cuáles pueden ser riesgosos 
Estar atentos a no suministrar información personal que pueda ser utilizada en su contra, por ejemplo: teléfonos, dirección de habitación y/o escuela y curso en el que estudian o lugares en los que se encuentran en un momento determinado,  claves de acceso a sus cuentas, números de cuentas bancarias o tarjetas de créditos de familiares.
No permitir  que le saquen fotos o videos, directamente o a través de la webcam, en las que puedas aparecer semidesnudo, en ropa interior o totalmente sin ropa.
No publicar comentarios de  la vida privada; no utilizar palabras que puedan ofender, humillar, descalificar… porque pueden responder de forma violenta o inclusive con agresiones físicas.
 Denuncian las situaciones. Si saben de casos de compañeros que tienen la intención de difundir información o imágenes que dañen su imagen o la de otros.
 Bloquear a las personas que te están haciendo daño y si es el caso denunciar ante las autoridades (Cicpc, Fiscalía, Consejo de Protección).
Hasta la próxima resonancia

VIOLENCIA EN LAS PANTALLAS

Navegar por internet es como salir a la calle. Debemos saber por dónde transitar, con
quién relacionarnos, qué lugares visitar y cuáles pueden ser riesgosos

Ahora que comienza el período vacacional los estudiantes tendrán mucho tiempo libre con pocas opciones para la recreación y el esparcimiento. Las tecnologías serán las encargadas de llenar esos vacíos.

Sabemos que se utilizan los celulares, internet, salas de chats, Facebook y otras redes sociales para “hacer una broma” sin darse  cuenta del daño que se puede ocasionar cuando esa información, que puede que sea verdadera o inventada, se hace pública, generando graves consecuencias.
En otras ocasiones  las  pantallas son utilizadas para vengarse por  situaciones personales, pasionales, celos, envidias, rivalidades con comentarios que  se publican  para desprestigiar y ofender públicamente.
Es importante  hacerles saber que toda la información que publicamos por internet, celulares, Facebook, Whatsapp u otras redes sociales después que se difundan sin posibilidad de control; ocasionando daños graves que pueden afectarnos o afectar a otros, psicológica, moralmente e inclusive poner en riesgo nuestras vidas o las de otros.
Hay ciberdelincuentes que se valen de internet para ganar su confianza y afecto, propiciando el acercamiento para luego abusar sexualmente, valiéndose de imágenes, videos, fotos que utilizan para extorsionar  y obtener dinero a cambio.
Utilizan como estrategia hacer ofertas engañosas, haciéndose pasar por academias de modelaje, productoras de castings para cuñas de televisión, concursos de belleza y de esta forma  engañan a quienes  convierten en sus víctimas.
¿Qué podemos hacer?
Utilizar de manera adecuada las tecnologías. Eso significa conocer todas sus ventajas; pero también sus riesgos. Se puede navegar junto a los hijos para hacer  uso adecuando de estas  herramientas. Recordarles  que navegar por internet es como salir a la calle. Hay  que tener  cuidado por dónde transitar, con quién nos relacionarnos, cómo  y con qué nos recreamos, qué lugares visitar  y cuáles pueden ser riesgosos 
Estar atentos a no suministrar información personal que pueda ser utilizada en su contra, por ejemplo: teléfonos, dirección de habitación y/o escuela y curso en el que estudian o lugares en los que se encuentran en un momento determinado,  claves de acceso a sus cuentas, números de cuentas bancarias o tarjetas de créditos de familiares.
No permitir  que le saquen fotos o videos, directamente o a través de la webcam, en las que puedas aparecer semidesnudo, en ropa interior o totalmente sin ropa.
No publicar comentarios de  la vida privada; no utilizar palabras que puedan ofender, humillar, descalificar… porque pueden responder de forma violenta o inclusive con agresiones físicas.
 Denuncian las situaciones. Si saben de casos de compañeros que tienen la intención de difundir información o imágenes que dañen su imagen o la de otros.
 Bloquear a las personas que te están haciendo daño y si es el caso denunciar ante las autoridades (Cicpc, Fiscalía, Consejo de Protección).
Hasta la próxima resonancia

¡SOLO POR HOY! PROMETO NO CONSUMIR

Hace dos semana me llama un familiar  para comentarme sobre  un pariente muy querido  que estaba pasando una  situación fuerte de  adicción. Acudí a un pariente  que ha logrado un proceso de recuperación que se evidencia con 20 años sin consumir.

Nos encontramos en una pequeña placita que está la entrada de la  Iglesia La Inmaculada, reconocida como la iglesia de El Recreo en la avenida  Solano, Caracas.  Es uno de los lugares donde re reúne la confraternidad compuesta de hombres y mujeres  para quienes la droga se ha convertido en un problema grave.
Montones de preguntas se agolpaban en mi garganta tratando de conseguir respuestas mágicas, rápidas y concretas para “resolver” esa situación que mantiene angustiada a la familia.
Voy a utilizar un nombre ficticio para mi pariente, pues así  me lo solicitó. No quise indagar en el por qué. Lo que más me interesaban eran sus respuestas a tanta incertidumbre. El nombre que utilizaremos es Carmelo.
Carmelo, ¿es importante participar en estos grupos?
Recuerda  que la adicción es una enfermedad crónica de la que te puedes recuperar. Lo primero es aceptar que somos adictos en recuperación y nos reunimos para ayudarnos a permanecer “limpios”  Esta iniciativa se sustenta en un programa de abstinencia completa de todo tipo de drogas y se basa en una serie de principios escritos de forma sencilla que deben seguirse diariamente.
¿Cómo llegan a este lugar?
Esa es una pregunta importante. Lo pueden traer, amarrado, anestesiado, manipulado emocionalmente, en ambulancia, helicóptero pero si no parte de su deseo de participar, es tiempo perdido y muy frustrante.
Una vez que decides participar no estás obligado a nada. No pagas cuota de inscripción, honorarios, no se firman documentos, ni exigimos  que se hagan promesas. No estamos asociados  a grupos políticos, ni religiosos. Cualquier persona puede unirse a nosotros sin importar su raza, orientación sexual, religión…
¿La persona debe confesar   las drogas que consumía, la cantidad, frecuencia, con quiénes se reunía?
No nos interesa esa información, tampoco concebimos como “una confesión” en un banquillo. Solo queremos que comparta qué quiere hacer con su problema y cómo podemos ayudarlo.
Carmelo, ¿cómo se reconoce una persona adicta?
Llegar a esta respuesta es complicado hermano. Lo cierto es que nos pasamos la vida pensando en las drogas. Cómo obtenerlas, cómo consumirlas y la forma de conseguir más y más y más. Imagínate que vivíamos para consumir y las consumíamos para vivir. En pocas palabras, una persona adicta  está secuestrada por las drogas. Estamos hablando de una enfermedad crónica, progresiva que nos arrastra invariablemente a las cárceles, hospitales y a la muerte.
Sabemos que tuviste que tocar fondo antes de llegar acá, que fue mucho el sufrimiento personal y familiar.
No podía con la vida porque no gozaba de ella. Pensaba que la droga me daría “la felicidad”. En una actitud egocéntrica anteponíamos el consumo al bienestar de mi familia, pareja, hijos. Hice lo que fuera para conseguir la droga. Hice daño a muchas personas; pero lo más duro de reconocer es que me lo estaba haciendo a mi mismo. No asumí las responsabilidades y lo que hacía era generar más problemas y dolor. Me di cuenta que con mi adicción me estaba suicidando. La adicción es un enemigo tan astuto que había perdido la fuerza para detenerlo.
En varias ocasiones estuve en la cárcel, en centros de recuperación terapéutica, indagué en la religión, fui al psiquiatra pero nada de esto fue suficiente.
Decidí venir aquí a Narcóticos Anónimos. Tuve que aceptar que era un enfermo. Una enfermedad que no tiene cura conocida; sin embargo, puede detenerse y la recuperación es posible.
¿O sea que si es posible la recuperación?
Se da cuando al final nos damos cuenta de que no podemos seguir así. Cuando nos planteamos la disyuntiva: ¿seguir y parar en la cárcel, el hospital, el cementerio o encontrar una posibilidad en Narcóticos Anónimos? En este programa espiritual pero no religioso encontré luces para mi vida.
¿Dónde pueden las familias buscar información?
Nuestras coordenadas son: 04120236602 o 04149263229. info@na.org
A las 4 de la tarde Carmelo se levantó y me dijo: Debo irme porque ya va a comenzar nuestra reunión. Me mostró el grupo de participantes y con voz emocionada afirmó: el milagro es que aun viviendo la vida que vivieron estén aquí. Muchos de ellos con varios años limpios.
Hasta la próxima Resonancias

EL AMOR EN TIEMPOS ADVERSOS

En estos momentos por los que atraviesa el país necesitamos sentir el amor de nuestros seres queridos. Sabemos que nos quieren, pero ahora más que nunca necesitamos sentirnos queridos.

Valdría la pena preguntar si se sienten amados. En un primer momento quizás respondan que sí, y argumenten que no les falta lo básico. Posiblemente en el fondo sienten que carecen de algo que cuesta poner en palabras.
En lo cotidiano nuestras conversaciones suelen ser secuestradas por los temas de la inflación, reconversión, lo confundidos que estamos con los nuevos billetes, con menos ceros pero se quedan cortos a la hora de pagar.
Los lamentos por el desabastecimiento de alimentos, medicamentos, repuestos para el carro… nos convierten en monotemáticos y nos quedamos sin energías para compartir los afectos. Sin embargo sabemos que cuando más necesitamos expresiones de amor y presencia es en los momentos difíciles, en esas circunstancias en las que nos sentimos solos, con miedo o impotencia por todo aquello que escapa de nuestro control.
Seguramente en nuestra historia personal, cuando hemos tenido crisis por separaciones, duelos, diagnóstico de una enfermedad personal o de algún ser querido, pudimos superar el tsunami emocional gracias a la presencia de amigos y familiares que nos apoyaron y acompañaron.
Paradójicamente son las situaciones difíciles las que nos permiten crecer, nos llevan a descubrir nuestras fortalezas e inclusive sirven de “cable a tierra” para tocar realidad y reaccionar.
¿Cómo responder a nuestros niños?
Seguramente, en estas circunstancias tan complicadas surjan preguntas que no queremos o no sabemos responder. Quisiéramos resguardarlos para que no se afecten emocionalmente.
Cuando hacen preguntas es porque algo vieron, escucharon o sintieron. Ayuda repreguntar para identificar de dónde surge la interrogante para responder de forma honesta y sencilla.
Queda de nuestra parte tomar la decisión de esconder o no lo que sucede. Si ocultamos se corre el riesgo de que asuman como normal que las personas hagan largas colas para todo, coman de la basura, nos quedemos sin agua o sin luz por largos períodos de tiempo, no alcance la comida, no consigamos medicamentos.
Tenemos la otra opción, formarlos haciéndoles ver que las cosas deben cambiar, que hay responsables de que no funcionen y que el estado tiene una gran responsabilidad de generar los cambios y como ciudadanos podemos y debemos exigir nuestros derechos.
Si no lo hacemos nosotros otros lo harán y posiblemente de forma poco adecuada. La imaginación también se encarga de hacer lo suyo y comienzan a buscar respuestas que pueden distorsionar sus percepciones de la realidad.
Cuando hablamos de responder no solo nos referimos a las palabras, sino también con qué actitudes reaccionamos.
Las repuestas afectivas con abrazos, besos y otras expresiones de amor son importantes para sentirnos amados y acompañados.
Hasta la próxima resonancia

DEPRESIÓN CON CARA DE NIÑO

Ricardo (7 años) comenzó a cambiar progresivamente su comportamiento. No  quería ir a la escuela, con frecuencia  se quejaba de  dolores de estómago, rechazaba la comida, dormía  mal, su desgano era tal  que no le provocaba jugar,  se volvió agresivo.

Carola,  su mamá, lo llevó al pediatra. Le hicieron varios exámenes y todos  los valores estaban normales. Le recomendaron un  psicólogo infantil que hacía equipo   con una psiquiatra. Lo evaluaron  y le diagnosticaron una depresión.
La mamá se negaba aceptar el diagnóstico. Le parecía imposible  que un niño de 7 años tuviera una depresión. El único cambio que hubo   fue la decisión de Alberto, papá de Ricardo, de irse a Madrid para buscar alternativas económicas y una vez estabilizado llevarse a la familia.
El duelo por la partida  del papá afectó mucho a Ricardo. Al principio Carola pensaba  que los cambios anímicos eran  transitorios, pero no fue así. Durante dos meses la situación emocional persistía y  se iba haciendo cada  vez más compleja.
Anímicamente se sentía y se veía mal. Le  costaba  poner en  palabras lo que sentía, solo  lograba reconocer  el dolor de estómago del que se quejaba con frecuencia
Le  frustraba no poder  responder a las expectativas de los demás. Se sentía culpable de no haber podido hacer  nada para evitar  que su papá se fuera. No entendía lo de las razones económicas.
No lograba concentrarse y eso afectó su rendimiento escolar. Lo único  que le atraía era encerrarse en su cuarto.
Según el psiquiatra los síntomas  que  presentaba Ricardo  encajaban  en lo que es un  cuadro  depresivo. Como antecedente importante estaba  la depresión que padecían algunos miembros de la familia. De hecho Alberto tuvo un cuadro depresivo detonado por la situación del país que requirió  tratamiento médico. A raíz de ese episodio  decidió el viaje.
¿Qué pasó con Ricardo?
El psiquiatra, una vez  que tenía  claro  el diagnóstico, conjuntamente con la psicóloga, involucraron a la familia para trabajar coordinadamente, incluyendo  con la escuela y de esta forma lograr un abordaje integral.
El tratamiento contempló un ciclo de terapia psicológica y  fármacos prescritos por el médico.  En un principio para la familia no fue  fácil vencer el tabú que existe en relación al tratamiento  con profesionales  de salud mental (psicólogos, psiquiatras, psicoteapeutas).
Poco a poco  fueron aceptando las recomendaciones de los especialistas. Por su parte   pusieron todo su empeño en demostrarle a Ricardo su amor y respeto por el momento estaba pasando, sin forzarlo, ni juzgarlo. Evitando la sobreprotección. Para Alberto la situación  era difícil  por estar fuera del país. Pero con las tecnologías  como aliadas se mantenía en contacto con el grupo familiar.
La depresión es una enfermedad. No es lo mismo estar triste que deprimido. La tristeza es una emoción válida. Cuando se hace crónica, persistente y se asocia a otros síntomas como los antes descritos el mejor acto de amor es buscar la ayuda profesional.
Seguimos creciendo juntos
@oscarmisle

¡NO QUIERO IR A LA ESCUELA!

Cinco de la madrugada, suena el despertador, es el inicio de clases. Toda la  familia  se  pone  en acción. Sebastián (6 años) se resiste a levantarse de la cama, llora y alega  que le duele el estómago. Raquel, su mamá estresada  le dice: “¡Te conozco Sebas, no seas  flojo levántate, ya tuviste bastantes  vacaciones! Mira tu hermanita Estrella, ya se levantó  y está preparando sus cosas”. Sebastián lo atrapa un ataque de ira y comienza a gritar: “¡No quiero ir a esa escuela!, No quiero ir!” Raquel trata de  calmarlo, pero nada, el llanto  se hace más  intenso y los  gritos so oían en el vecindario “¡No entiendes  mamá,  no  quiero ir a esa  la escuela!” ¿Qué le  pasa a Sebastián? Lo cambiaron de  escuela porque  Raquel no podía pagar la mensualidad. El colegio se vio en la necesidad de  subir significativamente la mensualidad por los aumentos decretados por el ejecutivo. No solo era solo era Sebas  también estaba  Estrella.

A Estrella la tranquilizaba que dos de  sus compañeritas también las cambiaron de la antigua escuela, y juntas estrenarían la nueva escuela.
Es muy importante prepararnos para el inicio  de  clases. Ese  estreno de las actividades genera mucho estrés en las  familias. Puede  que se  detonen  emociones  como miedo, inseguridad, tensión y que el dolor de estómago de Sebas  no sea un  invento.
Tendrá que  encontrarse  con una nueva  escuela. Esa nueva realidad  lo llevará a recordar  la anterior, en la  que  tuvo  gratas experiencias. Tendrá  que  vivir el duelo con todo lo que ello conlleva.
Seguro siente dudas de cómo será su relación con los nuevos compañeros ¿lo aceptarán? ¿tendrá que pagar el costo de ser  “el nuevo”?.
Durante unos meses, en su escuela anterior,  fue  víctima de acoso escolar  por parte de un estudiante de tercer grado. Se burlaba por el tamaño y la forma de sus orejas.  Guarda  en su morral la angustia de esa mala experiencia.
Puede ser  que  sienta resistencia  a someterse a pautas de   la disciplina, después de unos días de vacaciones con horarios flexibles, para acostarse y levantarse.
Durante  las vacaciones permitimos  cambios de ciertos hábitos, rutinas para comer, jugar… Lo ideal era  que se hubiesen ido  ajustando, poco a poco, antes del inicio  de clases.
Esos  primeros días es cuando más necesitan sentirse  queridos, comprendidos y apoyados por su familia. Lo ideal hubiese sido haber realizado con Sebastián  una visita a la escuela antes del inicio de clases para que pudiera conocer el lugar, las aulas, el patio, las canchas. Aprovechando ese  momento para  hablar, aclarar  dudas, contar  nuestras experiencias de niños y cómo las superamos.
El inicio a clases es  una  transición  que requiera paciencia, ajustar la  hora de  irse a la cama, abrir espacios para  compartir las expectativas y los sentimientos  que  hay sobre lo que desean, temen, imaginan, sueñan.
Es importante estar atentos a los cambios de comportamiento  o actitud. Puede  ser que el rechazo a su nueva escuela sea  un  reflejo  de algún problema no resuelto en la escuela anterior o en su vida personal.
Debemos escuchar sus temores, dudas, intereses con mucha atención y respeto. Sin juzgarlo ni calificarlo como flojo, manipulador… Es necesario  que sienta  que  volver a clases no significa un abandono de nuestra parte. Es necesario hacerle  sentir,   con expresiones de afecto, besos, abrazos,  que  siempre estaremos a su lado para apoyarlo.
Hasta la próxima resonancia

ABUSO SEXUAL. EL SILENCIO ES SU COMPLICE

Este fin de semana  la noticia del  asesinato, con evidencias de abuso sexual, de 4 niños, entre ellos 2 niñas  (10 y 4 años) y 2 varones de (10 y 1 año) consternó a la opinión pública. Sus cuerpos fueron encontrados en la casa de un vecino en el barrio El 70 de la parroquia el Valle, del municipio Libertador.

El abuso sexual se colocó una vez sobre la mesa, una expresión de violencia a la que se sumó la forma cruel en la que fueron asesinados los niños.
Duele e indigna imaginarse el terror que sintieron al presenciar  los abusos y asesinatos de 3 hermanitos,  el otro niño era un vecino.
No se sabe cómo sucedió el crimen, que relación tenía  este vecino con los niños ¿Era una persona cercana a la familia?  ¿Los había abusado  anteriormente? ¿El vecindario escuchó los gritos y el llanto? ¿Los que escucharon denunciaron?
Posiblemente algún vecino escuchó y prefirió callar, por miedo a las represalias, por desconocimiento o por la sensación de sentir  para qué denunciar  no se traduce en una respuesta efectiva para atender a las víctimas.
Temores reales por la desinstitucionalización del país. El deber ser  de la ley se estrella  con la falta de programas para aplicar las medidas. Tenemos un  sistema de protección cada vez más debilitado por falta de recursos, personal calificado, sin capacidad de respuesta oportunas y eficientes..
Es necesario aclarar que el abuso sexual es un delito  y que hay  que denunciarlo. Es toda acción en la que una persona utiliza su  poder para satisfacerse sexualmente con el niño o niña.
No  solo es penetración. También hay abuso si el adulto le pide  al niño  que le  toque los genitales para masturbarlo, hay caricias sexuales,  le exhibe o lo  hace participar en videos o películas pornográficas, hay penetración anal o genital, por solo citar algunas situaciones.
Muchas  víctimas guardan por años el silencio, con todo el peso emocional y psicológico que significa.
Para los afectados no es fácil  buscar  apoyo profesional, y más  complicado aun cuando se trata de un  niño varón. Se  oculta el abuso para evitar  que  se ponga en duda  su masculinidad.  Se teme denunciar  por lo  que implica  para  la familia asimilar que su  niño  había sido abusado sexualmente.
La mejor prevención es la ecuación sexual desde los primeros años para que aprendan a decir NO cuando algún adulto intente tocar sus partes íntimas. Es necesario  que aprendan a diferenciar una caricia afectiva  de una sexual. Si ha sido víctima  debe comunicarlo. Es necesario mostrar  confianza y creer lo que dice. El silencio es  el  principal cómplice
Hasta  la próxima resonancia
@oscarmisle

APRENDER CON CALIDEZ

“Aprender con calidez” es el título de la serie audiovisual 

producida por Comunifilm para Cecodap, gracias al apoyo de Save the Children y la Unión Europea. Es una serie documental que explora la educación venezolana en la actualidad, proyectando la mirada sensible y humana de educadores que innovan y llevan al aula, estrategias creativas y transformadoras para seguir conquistando a sus estudiantes y revalorar la experiencia educativa

Los  educadores protagonistas de estos cortometrajes tienen características, historias y vidas diferentes, pero movilizados e inspirados por el mismo propósito, llegar al corazón de los estudiantes. Son historias que muestran  estrategias basadas en la calidez, el vínculo, el afecto, el respeto y el reconocimiento. Vivencias que evidencian como, en un contexto de crisis, de carencias e injusticias,  hay quienes innovan con estrategias muy valiosas, que ponen como centro al niño y la protección de sus derechos.
Estos son los  educadores que no se olvidan porque se convierten en buenos y bonitos referentes para los estudiantes. Son siempre  recordados, a pesar de  la distancia y de los años,  por la  forma en que se relacionaron con ellos, con sus colegas, familias y comunidad.
Tienen en común en sus propuestas educativas innovadoras:
  • Más  que decir “buen trabajo” hacen saber el  por qué le parece  bueno.  Reconocen el esfuerzo  en el proceso y no sólo los resultados. Destacan las habilidades, destrezas, conocimientos y competencias evidenciadas.
  • Dedican tiempo para intercambiar, para compartir cómo se sienten los estudiantes, las cosas positivas o desagradables que están sucediendo en sus vidas, lo  que les  preocupa y proponen.
  • Refuerzan los  comportamientos deseables para  propiciar la autovaloración y reconocimiento de las competencias personales y   sociales.
  • Permiten a los  estudiantes tomar decisiones para  que desarrollen su autonomía. Estimulando  que se expresen  en los  buenos  y malos momentos, especialmente  cuando están involucrados en situaciones difíciles para   que sientan  que no sólo  son parte del problema  sino  también un factor clave en la solución.
  • Interactúan respetuosamente. Tratándolos  como nos gustaría ser tratados; siempre  y cuando se tengan  claro los roles y sin desdibujar quién es el adulto.
  • Comunican sus expectativas, lo que esperan del grupo de forma clara y respetuosa y se interesan en  conocer las expectativas de los estudiantes.
  • Incorporan el humor, el juego, el arte, la naturaleza y la recreación como parte de la práctica pedagógicaConvierten el arte en sus diversas expresiones en herramientas para la participación  creativa  y generadora  de conocimientos y reflexiones.
  • Alimentan la esperanza y la fe. Se afanan en verle sentido a lo  que hacen despertando  en los estudiantes el amor y respeto por la vida, agradeciendo, reconociendo, transmitiendo  que las cosas cambian cuando cada quien hace lo que le toca.   
  • Enseñan con su ejemplo y les transmiten  que  se puede errar;  pero  también rectificar y pedir  disculpas  cuando  se ha  actuado de  forma  inadecuada.
  • Invitan a los estudiantes  a expresar sus  ideas  y emociones. Les animan a  identificar   las decisiones  que han tomado, las consecuencias  que han tenido que asumir  y lo  que  han aprendido.
  • Fomentan la empatía y la compasión, especialmente  con quienes sufren situaciones adversas con estrategias  que pongan en acción la solidaridad,  cooperación y el apoyo.
  • Crean espacios para la reflexión y análisis crítico. Utilizando ejemplos, referentes históricos y culturales o datos de la realidad  del país.
  • Forman para la vida. Con estrategias  que promuevan el aprendizaje significativo, colaborativo y vivencial.
Hasta la próxima resonancia
@oscarmisle

¡CUANDO YO SEA GRANDE!

Recientemente en un taller convocado por la Red de Organizaciones para la los Derechos Humanos de los Niños, Niñas y Adolescentes (REDHNNA),  realizado con familias de la comunidad Las Casitas de La Vega, les preguntamos: ¿Cómo nos gustaría que fuesen nuestros hijos y estudiantes en la adultez?

Comenzaron a responder: “Felices, honestos, responsables, autónomos, críticos, que defiendan sus derechos, que no se dejen manipular, que opinen, protesten, que asuman las consecuencias de sus actos”. Uno de los niños presentes, con entusiasmo, levantó la mano y dijo: “me gustaría ser un buen padre, que eduque a sus hijos sin maltratarlos”. Otra niña expresó: “Cuando sea grande  quiero ser feliz”.
Este tipo de respuestas las solemos escuchar. Son aspiraciones  que se contraponen a los reclamos por la forma pasiva como se asume la realidad de Venezuela: “La gente no participa, es apática, conformista, indiferente, se deja atrapar por el miedo. Deja que otros decidan su destino, son cómodos”.
Lo otra pregunta sería: ¿Qué estamos haciendo hoy para lograr eso que queremos para nuestros hijos y estudiantes en nuestros hogares, centros educativos y comunidades?
Somos Noticia
El  martes, 2 de marzo, se presentó a la opinión pública “Somos noticia”.  Un informe que publica anualmente Cecodap desde hace 26 años; para dar a conocer la situación de los derechos de niños, niñas y adolescentes a la vida, la integridad personal, y a recibir la protección en situaciones de violencia.
Este año Cecodap y el Observatorio Venezolano de Violencia (OVV) decidieron compartir e integrar los datos registrados en investigaciones para examinar las características y magnitudes de distintos tipos de violencia que afectan el desarrollo y la protección integral de la niñez en Venezuela y darlos a conocer a la opinión pública.
El informe da cuenta del período enero- diciembre 2017 y  por solo  citar unos datos.
95 niños, niñas  y adolescentes fueron asesinados mensualmente, 76 niños menores de 4 años fueron asesinados en el año. 6 por mes. Cada semana 3 niños menores de 9 años, murieron por homicidio, 23 adolescentes fueron asesinados en el marco de las protestas.
90% de los homicidios fueron por armas de fuego.  La edad  de inicio de los victimarios cada vez es menor pero también la edad de las víctimas. Ya a los 10 a 11 años se inician como victimarios. Son seducidos por bandas  que los atraen ofreciéndoles comida
La mayoría de los victimarios son varones, viven en la  pobreza  y afectados por la violencia.
Descalzos pero con el pelo teñido
El fin de semana en los alrededores de la plaza Brion de Chacaíto , un grupo de 6 niños, descalzos, con aspecto deteriorado por el abandono y con cicatrices  en sus rostros, pero con la particularidad de  que todos tenía el cabello teñido de amarillo, ¿para hacerse visibles? ¿por la necesidad de sentirse parte de algo? No lo sabemos, lo cierto es  que  correteaban y jugaban dándose  golpes como tal vez la vida juega con ellos. Con su sola presencia muestran en lo  que se convierte  un niño cuando se le niega o violenta sus derecho a la educación, salud, a tener un familia, recreación… ¿Qué respondería uno de estos niños si le preguntáramos: “¿que quieres ser cuando seas grande?” Posiblemente no habrá respuesta, porque la muerte o la cárcel   los está esperando en su adolescencia.
Se requiere una Política Nacional de Protección  Integral de los derechos para que todos los niños y adolescentes sea protegidos de todas las formas de violencia sin discriminaciones. Los niños no serán el futuro  si no los protegemos en su presente.
Hasta la  próxima resonancia.
@oscarmisle

SE LE GASTAN LOS ZAPATOS; PERO NO LAS GANAS




“Las dificultades que yo tengo aquí para traer a las niñas (tiene tres hijas, dos en edad escolar) al colegio es el transporte, conseguirlo es sumamente difícil, y la comida está difícil y sumamente cara. El sueldo no alcanza”, dice Claribel Reyes, representante de la escuela Paulo VI, ubicada en la Cota 905.

“Yo he perdido muchos días de clases porque no puedo venir por el transporte”, cuenta Paola Pérez, estudiante de 6to grado de la escuela Paulo VI.
Paola vive en la parte más alta de la Parroquia La Vega a unos  cuatro kilómetros del colegio donde estudia. Cuando a su mamá se le daña el carro, como ocurrió durante todo el año pasado, tienen que pararse a las tres de la mañana para poder agarrar los jeeps, el transporte de las rutas troncales, que es cada vez más escaso y luego camionetas por puesto.
Jeanibel vive en Manicomio otro sector popular de la ciudad que está  a unos cinco kilómetros aproximadamente de la escuela Paulo VI, pero las dificultades para tomar el transporte hacen ese camino aún más largo.
Estos testimonios  fueron recogidos por Ana Carolina Griffin en la investigación “El empinado camino a la escuela en medio de la emergencia humanitaria en Venezuela”, solicitada por Cecodap  y  que contó  con la cooperación de Save the Children y la Unión Europea.
La realidad de  estas escuelas de La Cota 905,  La Vega, El Manicomio, son la muestra de la dura realidad  que viven nuestros  niños y adolescentes quienes deben  invertir sus energías para no abandonar la escuela.
Estos centros educativos han tenido  que hacer  de la adversidad una posibilidad. Han tenido  que replantearse el sentido de  la educación. Experiencias que se gestan en silencio pero con el poder del amor y el compromiso.
En Cecodap, en momentos en los  que nos ha arropado la sensación de impotencia  e indignación, de pronto en una visita a una escuela descubres como diría el teólogo  Arturo Paoli, que si  hay un retoño en el tronco seco es porque la savia fluye por dentro.
Esa savia la que nos impulsa a  implementar estrategias  formativas que le den significado y sentido a la educación para que sea transformadora.
Los escritores de la libertad
El pasado viernes 26 de octubre la AVEC, Circuito Gran Cine, Ashoka Venezuela,  Agora Venezuela y Cecodap realizamos el  Cine-foro “Los escritores de la libertad” del director Richard  La Gravenese, protagonizada  por Hilary Swant quien  le da vida a la profesora Erin Gruwel. En una escuela de Los Ángeles logra, pese  la adversidad  signada por la violencia, discriminación, exclusión producto del contexto socio político, llegar al corazón herido de  los estudiantes.
La profesora Erin no claudicó, a pesar de no contar  con el apoyo de la directora y la dificultad de integrar a las familias. En la adversidad  se  dio cuenta que había que  hacerle sentir a los estudiantes que sus vidas  eran importantes. Se las ingenió implementando estrategias participativas de integración que le permitieran a los estudiantes  reconocer que tenían más en común de lo que podían imaginar, por ejemplo: canciones, raps, honrar duelos por la pérdida de compañeros por asesinados por disputas entre bandas, heridas emocionales por abusos…
Le dio a cada  estudiante un cuaderno para que narraran sus  historias, pusieran en palabras lo  vivido en su hogares y comunidades, los motivó a leer el libro de Ana Frank entre otros, y les hacía preguntas para que sus heridas resonaran  con la de esta adolescente que murió con dignidad a pesar  de lo indigna de su muerte. El Holocausto le  quitó la vida pero no el alma.
Hemos constatado que la profesora Erin no está sola en nuestra  maltratada Venezuela.  Otras Erin  están trabajando con inteligencia, alma y corazón. Es por ello que Cecodap realiza alianzas para encender la luz  con estas  experiencias  que le dan vida y sentido a nuestra ensombrecida  educación.
Esta vez Fe y Alegría, Avec, Ashoka Vzla y Cecodap con el apoyo de la Unión Europea y Save The Children realizaremos un conversatorio en el que se presentará el corto “El empinado camino a la escuela” de Ana Carolina Griffin y Óscar González.
Luego se presentarán experiencias que revelan que sí es posible mantener la esperanza en la adversidad. Las responsables serán la Hna. María Isabel Quirós, Directora Colegio María Inmaculada de Fe y Alegría, Barrio Unión, Petare; la Hna. Rosana  Herrera, Directora Colegio Paulo VI (Cota 905); La Hna. Ivón Gónzález, Directora Colegio Jesús Maestro de Fe y Alegría Barrio José Félix Ribas, Petare.
Moderado por Fernando Pereira, fundador y directivo de Cecodap y este servidor con la reflexión final. La cita es el jueves 8 de noviembre de 2018, de  8.30 a 11:30 am. En la sede de Cecodap calle Orinoco, Bello Monte Norte, Caracas.
No tiene costo; pero es imprescindible registrarse en línea previamente ingresando los datos copiando y abriendo el siguiente link (contiene información adicional sobre el evento) //es.surveymonkey.com/r/cecodap
Hasta la próxima resonancia
@oscarmisle

LO ÚNICO COMÚN ES QUE SOMOS DIVERSOS

La madrugada del lunes 15 de octubre, el día de mi cumpleaños, Fernando  Pereira y este servidor arribamos al aeropuerto de Barajas, Madrid. Nuestra misión fue  visitar, en representación de Cecodap, escuelas transformadoras. Iniciativa que fue posible gracias a los enlaces realizados por Norma Pérez de Ashoka Venezuela y Simón Meréndez Ashoka España y con la cooperación de la Union Europea y Save the Children

Nuestro vuelo llegó con una hora de retraso por una tormenta que alteró los horarios. Estábamos seguros que por la hora y el retraso no nos estaría esperando el chofer del taxi que nos llevaría al hotel. Cuál no sería nuestra sorpresa que  al llegar  a la salida estaba Manuel, portando un cartel con nuestros nombres.
Nos enteramos de su nombre en el trayecto. Comenzamos  a conversar y  le comentamos el motivo de nuestra visita. Se interesó por el tema de la educación y las reformas  necesarias. Contó que su hijo estudió durante  tres años en un colegio que implementaba una metodología  innovadora. Los estudiantes  se sentaban en círculos para reflexionar  sobre  temas  que ellos mismos proponían. Los profesores los estimulaban para que en sus tablets buscaran la información y  auto gestionaran sus aprendizajes.
Manuel nos contó que su hijo era de pocas palabras, bastante tímido, le costaba tomar decisiones y que con esta metodología se había  vuelto más comunicativo e incluso crítico. Esto último  le empezó a preocupar. Estaba entrando a la adolescencia y con muchas oportunidades para  el ejercicio de la libertad temía  que se  le fuera de las manos. Decidió que mejor lo cambiaba a un colegio del Opus  más estructurado, con materias separadas y bien establecidas,  que pudiera evaluarse con exámenes que demostraran que dominaba los contenidos.
Fernando y yo nos vimos las caras sin que el retrovisor delatara nuestra expresión. El martes en la mañana todavía con las palabras de Manuel dando vueltas en la cabeza, llegamos al Centro de Formación Padre Piquer, un colegio de los jesuitas.
Muy amablemente nos atendió Gregorio Casado, responsable de innovación educativa e inclusión. Nos contó que el colegio tiene 52 años y atiende  a más de 1.100 estudiantes de bajos recursos,  con una población importante de inmigrantes de los 5 continentes, de 7 religiones y 37 nacionalidades diferentes.
Participan estudiantes de 12 a 16 años de la Educación Secundaria Obligatoria (ESO) y Bachillerato. Es un colegio concertado (subsidiado con fondos públicos).
El 50% de los estudiantes  no está en el curso que le correspondería por su edad. En la medida en que la llegada  de estudiantes  inmigrantes fue creciendo, las dificultades  y conflictos fueron mayores. Las distancias culturales, necesidades e intereses contrapuestos, religiones e ideologías diversas con sus cargas emocionales producto de separaciones, duelos, resentimientos, intolerancia y rechazos los interpeló de tal forma  que les hizo plantearse: “O nos renovamos o morimos”.
Las innovaciones transformadoras
  • Replanteo del enfoque y práctica pedagógica. El centro no podía ser el currículo, lo esencial eran los estudiantes
  • Creación de aulas cooperativasEn las que pasen muchas cosas y que exigieron redefinir los  “cómos” a través de  proyectos de aprendizaje significativos creando las aulas multitareas en las  que se globalizan los aprendizajes en los ámbitos sociales, lengua e inglés; científico-matemático y artístico. Se superan así los contenidos fragmentados.
  • Flexibilizar los horarios. Más tiempo para atender las necesidades de los estudiantes, no a través de materias  con horarios inflexibles,  sino a través de ámbitos de  aprendizaje con 60 alumnos y 3 profesores que co-educan generando ambiente de participación colaborativa.
  • El medio es el mensaje tal y como planteó el filósofo canadiense McLuhan. Se eliminaron las “mesas del profesor” y se estimuló la interacción de los estudiantes, superando la idea de “Si no se juntan mejor”
  • Contar con tiempo para acompañar, conocer, estimular. “Los estudiantes deben sentirse amados de lo contrario es muy poco lo que se puede hacer”
  • Importancia de los procesos más que los propios contenidos.
  • Educar para estimular vínculos. Sentirse aceptados, reconocidos, valorados.
  • Aprender para la vida y la toma de decisiones. Tradicionalmente se enseña para olvidar y lo que se retiene “se vomita” en exámenes.
  • Pocas tareas escolares y diferenciadas tomando en consideración las competencias que se pretenden reforzar y las inteligencias múltiples.
  • No utilizan uniforme escolar. Un tema controversial que da respuesta a la importancia de entender la diversidad como valor y no la homogenización.
  • Los “buenos días” constituye un espacio diario para las reflexiones, oraciones ecuménicas. El tiempo dedicado es flexible y variará de acuerdo a los aspectos abordados y el contexto.
  • Un tutor (guía) por cada 30 estudiantes para atender situaciones personales.
  • Las tecnologías como aliadas. Los iPad como herramienta para la investigación y el trabajo en equipo.
  • Aulas de enlace para que los estudiantes inmigrantes puedan aprender el idioma y nivelarse académicamente.

Lo que han aprendido.
  • Necesidad de salir de las burbujas en las que solíamos ocultarnos desconociendo que existen otras realidades con poca empatía y comprensión.
  • No es cierto que solo es importante la calidad del tiempo que se dedica a los estudiantes; también es vital la cantidad.
  • Aprendizaje que no es vivencial y significativo se olvida.
  • La educación emocional permite construir proyectos de vida que tomen en cuenta nuestras necesidades pero también las de los otros.
Cuando nos invitaron a hacer el recorrido por las instalaciones para ver de cerca el trabajo de los estudiantes conmovía ver rostros achinados con cabellos lacios, rostros morenos con cabellos rizados, cabellos rubios ensortijados interactuando sin que las heridas generadas por las razones que los hicieron emigrar los alejaran sino al contrario descubrieron que ser diversos es lo que tenemos en común.
Hasta la próxima resonancia.
@oscarmisle

VIOLENCIA. HAY QUE HABLAR CON LOS NIÑOS

  Óscar Misle Óscar Misle Los recientes enfrentamientos armados en la Cota 905 y comunidades aledañas y los operativos que se van realizan...