LIBRO: OSCAR MISLE Y FERNADO PEREIRA. CECODAP |
Los niños y niñas pelean mucho entre ellos y con otros niños y niñas. Bien sea porque están molestos, se metieron con ellos o aprendieron en la casa que los conflictos se resuelven con golpes. Tienen desacuerdos y quieren que prevalezca su posición.
¿QUÉ PUEDO HACER?
· Cuando estén discutiendo, sin golpearse, déjelos solos. Con las peleas aprenden a resolver sus problemas sin que tenga que intervenir una persona adulta. Si se sienten muy molestos, no trate de resolver el conflicto en ese momento porque sus emociones no les permitirán hablar con serenidad.
· Cuando estén más calmados, apóyelos para que puedan encontrar una manera para resolver sus diferencias sin agresiones. Es contraproducente preguntar cómo empezó la pelea o quién la originó, porque cada uno le echará la culpa al otro.
· Permita que digan lo que sienten, inclusive que manifiesten su rabia. Estos sentimientos son normales y no desaparecen porque usted no los quiera escuchar.
· Permita que expresen sus sentimientos de rabia siempre y cuando no golpeen ni digan palabras que ofendan al otro.
· Es importante que aprendan que sentir no es malo. Le podemos decir: "Me doy cuenta de que estás muy bravo con él; pero pegarle a alguien no es el camino correcto".
· No los compare entre sí o con amigos, primos, vecinos, porque genera rivalidades. Las comparaciones suelen hacer que los niños y niñas peleen más.
· Cuando pelean porque uno quiere ver un programa de TV distinto al otro, usted puede decirle: "Voy a apagar el televisor hasta que logren ponerse de acuerdo en el canal que quieren ver. Si no lo logran no va ser posible que vean la TV. Solo cuando se pongan de acuerdo lo volvemos a prender".
CUANDO SE ESTÁN GOLPEANDO
· Si se están golpeando, sepárelos y dígales: "No le hagas daño a tu hermano/a", puedes buscar otra forma de manifestar tu desacuerdo". Es conveniente decirle que de esa manera no se solucionan los problemas y le puede solicitar que busquen otra forma, sin agredirse.
· Si están peleando por un juego, dígales: "Veo que no se ponen de acuerdo para jugar, así no pueden continuar", (retirar el juego hasta que asuman una actitud distinta).
LO QUE PUEDO SENTIR
Sus peleas podrían angustiarnos porque pueden agredirse, perjudicar sus relaciones y vínculos, afectando la relación familiar. Al mismo tiempo puedo creer que sólo la armonía y la paz es la que debe reinar en el hogar y considerar que cualquier expresión de agresividad significa que tengo hijos(a)s, nieto(a)s o nietas con problemas. Puede ser que mi relación como pareja o en la familia sea muy violenta y los niños y niñas copien la forma en que solemos reaccionar cuando tenemos problemas con otras personas.
Leer mas en: http://www.revistadominical.com.ve/Noticias/Hogar/Peleas-entre-hermanos.aspx#ixzz2WEJyQ3xT