Óscar Misle Terrero
@oscarmisle
En
las últimas semanas hemos sido testigos de lo afectada que está la salud física y mental de los
docentes. Los talleres, conversatorios, encuentros se convierten en espacios de catarsis por la difícil
situación que les toca enfrentar.
10 señales de alarma:
10 señales de alarma:
1. Deterioro físico. No se están
alimentando de forma adecuada. Deben
sacrificar algunas de sus comidas
diarias. La ingesta es de mala calidad y poca cantidad. La pérdida de peso es
evidente. Las deficiencias nutricionales afectan su rendimiento.
2. Angustia por la deficiente remuneración con una realidad inflacionaria que impide el
dinero alcance para satisfacer las necesidades elementales. Los espacios para
el esparcimientos y recreación son
eliminados de la lista de prioridades por
la precariedad de sus ingresos
3. Sentimientos de impotencia para abordar los
conflictos. La convivencia
escolar se ve afectada por los conflictos sociales y políticos en los que la violencia, hostilidad,
intolerancia generan agresiones entre
los diferentes miembros de la comunidad educativa. Situaciones que requieren estrategias de resolución
de conflictos, de negociación, pactos o acuerdos que exigen la formación para su conocimiento e
implementación.
No en pocas ocasiones
las reacciones de los alumnos y sus familias se
traducen en amenazas, agresiones
verbales e incluso físicas.
4. Incomprensión y críticas que afectan su estado
emocional. Se les
exige incondicionalidad, capacidad de respuesta a situaciones complejas que escapan de sus posibilidades. Especialmente
problemas emocionales de los estudiantes
que se trasladan de la familia al aula y que requieren la intervención de especialistas en salud
mental con los que no se cuenta en la
mayoría de los centros educativos
5. Frustración y
angustia al no lograr el rendimiento escolar esperado. Los motivos son complejos y variados.
La falta de motivación en las actividades académicas suele ser consecuencia de
la conflictividad político social que
afecta a los estudiantes y comunidad en
general, la alteración de las rutinas escolares por la dificultad para asistir a los centros educativos por la suspensión del metro, transporte público,
trancas de las vías de acceso o represión que
afecta a los centros educativos
que se encuentran en las adyacencias de las zonas
conflictivas
6. Rabia y sentimiento
de culpa al sentir que no pueden expresar su descontento o apoyo a las marchas
sacrificando su derecho ciudadano a
exigir cambios sustanciales en sus condiciones de vida en lo familiar y
profesional
7. Soledad al no
contar con la comprensión y apoyo del personal directivo. Sus propuestas e iniciativas no son valoradas. Se les exige que actúen
en una “normalidad” ficticia que no
se ajusta a lo que exige la realidad. No
se realizan actividades de refuerzo
socioemocional con el equipo docente que permitan hacer catarsis, expresando sentimientos y emociones con estrategias
apropiadas para canalizarlas
8. Miedo e indignación. Al sentir que se impone un estado cada vez más autoritario, que busca legitimarse con
decisiones unilaterales impuestas como
es el caso de actividades proselitistas como las asociadas a la constituyente
educativa.
9. Confusión e inestabilidad por las luchas de
poder en el seno de las instituciones educativas por las diferentes posiciones, muchas radicales, por las
familias en relación a la suspensión de la actividades escolares, las presiones
de las zonas educativas por mantener las
clases obviando las realidades y los
riesgos reales presentes en las zonas de
mayor conflictividad.
10. Angustia al no contar con planes de contingencia. Los centros
educativos que son blanco de agresiones por la represión o por hechos
delictivos ponen en riesgo la integridad
de los miembros de la comunidad educativa especialmente la de los niños y
adolescentes
Cecodap y el
Consejo Municipal de Derechos del Niño, Niña y Adolescente del Municipio Chacao
ofrece la conformación de un grupo de apoyo psicosocial a docentes en contextos de crisis. Es gratuito
pero requiere inscripción pues el cupo es limitado. Para mayor información
pueden contactarnos a cecodap.creciendosinviolencia@gmail.com