Óscar Misle
Cada 31 de mayo se celebra el Día
Internacional de no Fumar, su objetivo es crear conciencia sobre los peligros
asociados al tabaco.
Según la OMS cada año fallecen
aproximadamente 6 millones de personas a consecuencia del tabaquismo, siendo
una de las principales causas el cáncer (pulmón, cavidad oral, faringe y
laringe).
El covid ha evidenciado que la
población fumadora tiene mayor riesgo.
Los niños aprenden lo que ven y van
asimilando, desde los primeros años, como el cigarrillo se convierte en un
aliado para los adultos desde que comienza el día, con el café, cuando se va al
baño, cuando se está ansioso, etc.
Se va instalando una de las adicciones
más difícil de superar. Cuando llega la adolescencia, quienes no han tenido el
estímulo en el hogar, le puede llegar por la presión grupal.
Para la médico neumnóloga de la Sociedad Anticancerosa de Venezuela, Lérida Padrón, es necesario redoblar la
prevención en la población juvenil que se perfila como ‘presa fácil’ para
convertirse en adictos al tabaco y posibles víctimas del cáncer de pulmón.
Para Padrón es preocupante el uso de los vapeadores y otros
dispositivos similares por parte de los adolescentes, algunas veces adquiridos
por sus padres, quienes piensan que se trata de productos inocuos, quizás con
la esperanza de evitar el consumo del cigarrillo convencional. Sin embargo, los
líquidos de estos dispositivos pueden contener nicotina (aunque digan 0% nicotina) que es
altamente adictiva.
Los adolescentes que usan cigarrillos electrónicos o vaper
podrían tener más posibilidades de fumar cigarrillos convencionales en el
futuro.
¿Es más sano vapear?
Entrando en los 14 años Luciano ha dado signos de estar iniciándose en el consumo de cigarrillos. Luisa, su mamá,
está preocupada, en un par de ocasiones, ha captado el olor a nicotina en su
ropa. El insiste en que no está fumando. Argumenta que el olor es porque en el
grupo de sus compañeros hay dos que si fuman.
Su justificación no tranquiliza a Luisa. Sabe lidiar con el vicio
tabáquico pues Lorenzo, su esposo, fuma una cajetilla por día y está pensando
en comprarse un vapeador para ver si logra desengancharse de la dictadura del
cigarrillo.
Luisa se enteró por el grupo de padres en el whatsapp que algunos estudiantes están vapeando generando
curiosidad e interés en el resto del
grupo
El colegio convocó una reunión con las familias
para resolver algunos problemas de convivencia. Una madre aprovechó la ocasión
para poner sobre la mesa el asunto de los vapeadores. Se generó una discusión
sobre su inocuidad.
Gerardo
Mata, uno de los representantes, neumólogo, intervino señalando que la adicción a la nicotina
genera una gran dependencia y es una droga que ha sido considerada lícita de
ahí que sus efectos hayan sido (y son) devastadores. Infecciones respiratorias,
enfisemas, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), tumores… son el
pronóstico de la adicción tabáquica.
Luisa, angustiada intervino, “por favor aclárenme ¿estos vapeadores son
inocuos o no? ¿Es mejor que vapeen a que fumen? ¿Es mejor utilizarlos como
medio de prevención?”.
Algunos
padres no tenían ni idea de dónde su hijo había obtenido el cigarrillo
electrónico, ni siquiera sabían identificarlo. Otros aseguraron que no le
venden a adolescentes; pero algunos han tenido la experiencia de que las
regulaciones para estos dispositivos no son tan estrictas.
¿Por qué es dañino?
Hillary Gordon
define con precisión: “Vapear es inhalar el vapor creado por un cigarrillo
electrónico u otro dispositivo para vapear. Los cigarrillos electrónicos son
dispositivos a pilas para fumar. Tienen cartuchos llenos de un líquido que
suele contener nicotina, saborizantes y sustancias químicas. El líquido se
calienta y se convierte en un vapor, que la persona inhala. Por eso, el uso de
los cigarrillos electrónicos recibe el nombre de vapeo”.
El que se ofrezca un saborizante con sabor a tuti
fruti está dirigido especialmente a captar el público infanto juvenil generando
alertas en varios países por el acelerado aumento del consumo entre niños y
adolescentes.
Algunos adolescentes utilizan una versión llamada
juul, un cigarrillo electrónico que es como un pen drive y puede contener
nicotina y se carga en un puerto USB de
la computadora y emite menos cantidad de vapor, similar a la de un cigarrillo,
por lo que es menos llamativo en la casa, colegio y puede pasar inadvertido.
No solo en el colegio de Luciano se
da la discusión. En todo el mundo se debate sobre el impacto de los
cigarrillos electrónicos y se han anunciado decesos de pacientes que utilizaban
estos dispositivos
José
María Ignacio, jefe de Servicio de Neumología del Hospital Quirón,
considera que se ha producido un error de concepto al minimizar las
consecuencias del uso de vaporizadores. "El pulmón está preparado para respirar aire
puro y transportar el oxígeno del alvéolo a la sangre. Cualquier producto o
sustancia que se vapee es nocivo para nuestro cuerpo".
Otro de los
aspectos que preocupa a los especialistas, según explica Ignacio, es que
"no existe un único cigarrillo electrónico y se utilizan distintas
sustancias que se pueden conseguir por diferentes vías (internet) sin control
sanitario y al margen de las autoridades".
Neoalquimistas
Ricardo Montiel, médico especialista en
adolescentes, los define como “neoalquimistas caseros” por su capacidad para
realizar aleaciones con diferentes sustancias, incluyendo drogas, teniendo en
internet un aliado para explorar diferentes opciones para alterar los
dispositivos.
Los adolescentes por naturaleza necesitan retar la
autoridad y acariciar la seducción de lo prohibido. Consideran que nada les
pasará; pero como adultos nuestro papel es proteger y no crear las condiciones
para que adquieran una adicción para preservarlos de otra adicción. Es una
contradicción.
Las sociedades médicas y ministerios de salud
de varios países de nuestra región advierten sobre los riesgos de perder los
avances en la disminución del consumo de nicotina entre los más jóvenes logrado
en los últimos años e insisten en los
efectos causados: consecuencias adictivas de la nicotina, inflamación e
irritación de los pulmones y tejidos causada por el vapor, daño por inhalación
de sustancias químicas, un costo económico cada vez mayor y se constituye en
puerta de entrada para que los adolescentes adquieran otras adicciones.
Hasta la próxima resonancia