Cuando escucho tu silencio, mucho mas cerca te siento
tu corazón me susurra eso que sientes por dentro...
Mariela, una paciente, en una consulta me comentaba, con tono de frustración, que no podía entender porque a su esposo le costaba tanto comunicarse y expresar sus sentimientos, particularmente en los momentos especiales.
De pronto, muy molesta, abre su bolso y coloca sobre mi escritorio, con una actitud despectiva, un pequeño equipo protegido por un forro color lila.
Muy extrañado por su actitud le pregunto: ¿Qué pasó?. Muy molesta me dice: “Eso fue lo que me regaló Roberto en mi cumpleaños”. Le pregunte: ¿No te gusta el regalo? Ansiosa respondió: “el problema no es el regalo, él sabía que estaba loca por un blackberry nuevo, me la compró del modelo que quería y hasta escogió el estuche con mi color favorito”
Y entonces ¿Cuál es el problema?. “El problema es que me dio el regalo sin decirme nada!” ¿Y que querías que te dijera? “No se, que lo había comprado para complacerme, que seleccionó el color pensando en mí, que me ha observado y se ha dado cuenta que ese es mi color favorito, que se moría por entregármelo para ver mi reacción… No se , esas cosas que uno dice cuando quiere a alguien…
¿Y Roberto no te quiere? Si, ¡pero no me lo dice! ¿Y por qué no le pones tú esas palabras que quieres escuchar?, como por ejemplo: Me encanta el teléfono, me hace feliz que conozcas mis gustos, que selecciones el color que me gusta, que me invites a cenar para darme el regalo y hacer de este momento algo especial… Es posible que a Roberto tus palabras le resuenen y se sienta motivado a seguir dando pasos en medio de su discapacidad emocional y se anime a ponerle palabras al amor , a su modo, pero no por ello menos amorosas y significativas
Este trabajo de ponerle palabras al amor para expresar sentimientos, para que nuestros seres queridos se sientan amados, no es fácil, es un proceso que exige tiempo, autorevisión... para echarle un vistazo a esas pautas de crianza en las que aprendimos que el amor se demostraba con hechos y no con dichos.
Abramos el corazón para estar atentos a las señales del amor
Seguimos resonando!!!
Un abrazo
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