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martes, 25 de agosto de 2015

VIOLENCIA ESCOLAR: MÁS HECHOS QUE DICHOS

Por: Óscar Misle, @oscarmisle



Violencia escolar: más hechos que dichos
¿Qué haces contra la violencia escolar? (Créditos: Shutterstock.com)

En el marco de un diplomado realizado por Instituto Autónomo del Consejo Municipal de los Derechos de los Niños, Niñas y Adolescentes del municipio Baruta y la UCV, me invitaron a realizar una ponencia sobre “Violencia Es. La metodología que implementé fue un conversatorio que permitiera interactuar y conocer lo que piensan, sienten y hacen los participantes para prevenir y actuar cuando la violencia se hace presente en los centros educativos.

Al finaliza la actividad solicité que respondieran 2 interrogantes: 1.- ¿Qué estoy haciendo para abordar la violencia escolar? 2.- ¿Por qué no se logra mejorar la  convivencia escolar?

1.- ¿Que estoy haciendo para abordar la violencia escolar?

Entre las acciones destacaron:
Realizar reuniones con directivos y equipos de trabajo, encuentros formativos con estudiantes y representantes para escuchar y valorar sus opiniones, enseñar con el ejemplo a respetar las opiniones de los demás.

Entender el lenguaje corporal y emocional, mostrar la pedagogía del amor con hechos,  ir a la raíz de  los problemas, haciendo preguntas, escuchar por separado a cada una de las partes involucradas en los conflictos en un espacio  en el que se pueda garantizar la confidencialidad y la seguridad, recomendar lecturas, promover los valores, implementar técnicas de dinámica de grupo para el trabajo vivencial de la empatía, promover actividades lúdicas, artísticas, dramatizaciones  para el abordaje dinámico y vivencial.

Implementar técnicas  para la resolución de  conflictos, realizar carteleras, afiches, pancartas, salirse un poco de los paradigmas y prejuicios, establecer grupalmente los acuerdos de convivencia, enfatizar el valor del respeto, el amor  hacia sí mismo  y hacia los demás.

Evitar  privilegios que  generen  injusticias, realizar estudios biopsicosociales de los casos involucrados en situaciones de  violencia, hacer seguimiento, llevar los manuales de convivencia a la  práctica tomando en  cuenta la realidad familiar y el  contexto de país.

Formar para el adecuado uso de las redes sociales, aclarar la diferencia entre falta y delito, informar sobre lo que significa la responsabilidad penal de los adolescentes, asumir el compromiso  para  que las medidas dictadas por los  consejos de protección sean efectivas, abordaje psicológico especializado, promover líneas de investigación sobre el tema para las tesis de bachillerato.

Promover el intercambio de conocimientos y vivencias entre los estudiantes de años superiores  con los más pequeños, implementar la campaña del buen trato.          
2.- ¿Por qué no se logra mejorar la  convivencia escolar?

En relación a esta interrogante lo más significativo fue:

Los educadores se centran solo en impartir información, cumplir con los programas y no realizan actividades y acciones que responden a las necesidades socioemocionales de los estudiantes y comunidad en general.

Se hace más énfasis en  que el estudiante sea bueno porque saca buenas notas y o que sea buena persona, no se actualiza el manual de convivencia y a veces  “nos hacemos los locos”, no se involucran a todos los protagonistas en la formación,  directrices superiores  que no posibilitan la creatividad y la toma de decisiones.

Directores que no se adaptan a los nuevos tiempos, los docentes, estudiantes y familias no tienen sentido de pertenencia, no involucra a los estudiantes en la elaboración de los acuerdos de convivencia.

Cuando esto se convierten solo en un  requisito administrativo dificultad para el trabajo con las familias por la lucha de poder, falta de preparación de docentes y directores para el abordaje de la violencia escolar, falta de tiempo y espacio para abordar el  problema.

La falta de acuerdos y trabajo coordinado, los maestros sienten miedo a enfrentarse a los alumnos y a su familias,  en ocasiones  no escuchamos, somos negligentes, se utiliza la represión y no la razón, aun no entendemos  qué significa la equidad de género, falta de compromiso de los miembros de la  comunidad educativa, los malos ejemplos, lo que se dice no tiene nada que ver  con lo que se hace, no existe estrategias efectivas y afectivas para la comunicación.

Falta o deficiencia de políticas públicas, la violencia  social y delincuencial entra en la escuela, pérdida de autoridad  de los educadores y familias.
Sigue siendo prioridad que los dichos se conviertan en hechos.

¡Seguimos creciendo juntos!


Leer mas en: http://www.revistadominical.com.ve/noticias/firmas/violencia-escolar--mas-hechos-que-dichos.aspx#ixzz3jrzLmHzu

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