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jueves, 19 de agosto de 2021

LA SOLEDAD DESOLADA



Óscar Misle 

En uno de los  encuentros de “Los adolescentes toman la palabra”, realizado por Cecodap  vía Zoom, con más de  50 adolescentes de diferentes centros educativos del país, conversábamos sobre cómo estaban viviendo el confinamiento, cómo los afectaban…”Yo me he sentido muy solo a pesar de tener más tiempo con mi familia. No entienden lo que estás sintiendo, lo que pasa por tu cabeza, no lo sé explicar muy bien, pero me siento solo acompañado” (Ricardo 16 años)

La soledad se puede sentir por diversos motivos y de diferentes formas. Esta cuarentena  puede generar en nuestros niños y adolescentes sentimientos de soledad, no pueden compartir presencialmente con otras personas significativas, como por ejemplo sus amigos o compañeros de clase. Sentimientos  que muchas veces no saben  expresar o reconocer. Se traducen en comportamientos hostiles o inadecuados para expresar su malestar.

Se suele escuchar que las tecnologías de información (internet, celulares…) nos acercan a las personas que están lejos pero nos separan de quienes tenemos cerca. Esta afirmación sigue siendo muy acertada, gracias a las tecnologías podemos mantener contacto en el confinamiento con nuestros seres queridos, ver su imagen, escuchar su voz es un aliciente muy grande en estos momentos de separación forzada.

También es cierto que lo virtual, como único medio de interacción y expresión entre quienes estamos cerca, limita la comunicación y contacto cara a cara, piel a piel… Ya no se hace una llamada telefónica para felicitar por un cumpleaños, un mensajito o emoticón hacen el trabajo, se inician y terminan relaciones, se dan pésames o despedidas virtualmente.       

La soledad desolada

Decíamos que  se puede estar solo por diferentes motivos, por decisión, por alguna circunstancia como por ejemplo la muerte de algún ser querido por divorcios o separaciones, eso genera sentimientos de tristeza, rabia, abandono que puede desencadenar depresiones,  e incluso ideación suicida. La vida pierde sentido y no se es capaz de sentir ganas de vivir, sentimientos  que se profundizan cuando en la relación ha existido mucho apego o dependencia emocional.

Es lo  que se pudiera entender como la soledad desolada, esa sensación de no sentir alivio o consuelo, sintiéndose triste y abatido.       

Soledad emocional

Se da cuando se siente sequia emocional, se pierde la capacidad de sentir y expresar el amor. Don Juan  Bosco decía que a los muchachos  no basta quererlos, tienen que sentirlo  y es cierto, el reconocimiento, la empatía, las expresiones de amor son alimentos para el alma.

La soledad puede brindarnos oportunidades para buscar dentro lo que no encontramos afuera, existe diferentes formas del encuentro consigo, la meditación, las afirmaciones  y visualizaciones, el reconocimiento de los que somos, sentimos deseamos, el acompañamiento terapéutico, puede ayudarnos a convertir la soledad en la edad del sol, de la luz interior  que nos conecte con lo que esencialmente somos  y valemos.

Los duelos hay que vivirlos

Es un proceso  en el que hay que  pasar por diferentes momentos, rabia, negación, alivio. Puede ser  útil escribir lo que sentimos  para poner en palabras y desahogar lo que vivimos. Es  aceptar que las personas que partieron ya no están con nosotros pero se quedan  en nosotros. Cada olor, música, color, activan nuestro recuerdo en la memoria de nuestro corazón.

La película Coco de Walt Disney si algo pone de manifiesto en la cultura es  el miedo al olvido, que es otra forma de morir. Mantener vivos a nuestros seres queridos es recordarlos, honrarlos y perdonar para que el amor cumpla con su poder sanador y liberador             

Cantidad y la calidad. 

Con frecuencia decíamos: “lo que importa es la calidad y no la cantidad del tiempo”. La experiencia del confinamiento no ha obligado a convivir muchas horas juntos, hemos tenido   que ingeniárnosla para dedicar tiempo de calidad con una realidad desafiante emocionalmente. La ansiedad por la incertidumbre, el aislamiento, las tensiones por las amenazas que implica el contagiarse o morir por covid19 están    por lo tanto  es necesario hacer el esfuerzo para  reservar  espacios  para que sienta nuestra presencia afectiva, comunicarnos, y expresando nuestro amor.

Relacionarse con el entorno a través de una computadora o un celular , bien sea para recrearse, informarse o vincularse es una posibilidad para un sector de la población. Hay que estar atentos que a través  del  contacto virtual  traten de buscar de  forma riesgosa  respuesta a su sentimientos de soledad  y encuentre atención de alguien que se aproveche de su vacío para abusar de  ellos.

Es necesario el contacto personal que fomente  la intimidad, mirarse a los ojos, abrazándonos, escuchándonos, para nutrirnos emocionalmente y fortalecer las "defensas emocionales" para que juntos podamos  superar las dificultades y  frustraciones y disfrutar de los pequeños logros del día a día.

La soledad puede generar vacíos, insatisfacciones y heridas de abandono que si no son satisfechas pueden buscar desde el inicio de la adolescencia, y a veces antes,  buscar en  el alcohol, cigarrillos, drogas, posibilidades de “escapar” del dolor y la tristeza por las necesidades emocionales que no han sido cubiertas en su entorno familiar.

No significa  que debemos estar todo  el tiempo encima. En momentos la soledad puede ser necesaria  para estar consigo mismo. Es distinta la  soledad elegida a la impuesta.

Hasta la próxima resonancia

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