Páginas

viernes, 25 de enero de 2019

CORAZONES CON MEMORIA



Victoria es una abogada que dedica su vida a la defensa de la niñez y la adolescencia. Una realidad difícil que asume con valentía, haciendo honor a su nombre.

En el 2006, como tantos venezolanos, sintió una fuerte conmoción al conocer que, tras un prolongado secuestro, los hermanos Faddoul, de 12, 13 y 17 años, habían sido asesinados.
El cruel suceso, la impactó de tal modo en su condición de madre, abogada y defensora de los derechos humanos desde sus tiempos universitarios, que decidió fundar una organización civil que llamó La Zaranda. Usando como símbolo el ruido y el movimiento de este juguete tradicional, Victoria llenó de sentido su vida y comenzó una cruzada en compañía de seis amigos, profesionales de distintas disciplinas, para documentar cómo la violencia trunca las vidas de los niños y adolescentes del país, y sensibilizar a la sociedad sobre este grave flagelo que ha tomado cuerpo sin que el Estado haga nada para frenarlo.
Fernando Pereira y este servidor, creamos el personaje de Victoria para darle vida en nuestro  más reciente libro  Corazones con memoria. Es una  suerte de espejo y resonancia   de nuestra experiencia por más de 30 años como defensores de los derechos humanos. Nos arriesgamos a escribir esta novela basada en hechos reales. Tiene como telón de fondo la Venezuela del siglo XXI.
En el prólogo Luis Olavarrieta nos comenta como para los venezolanos, el 2014 llegó con tristeza. Apenas se iniciaba el sexto día del año cuando un estruendoso rumor comenzó a tomar fuerza. La desesperación se apoderó de los primeros minutos de esa mañana.
“Los teléfonos no dejaban de sonar. Mensajes iban y venían. Hasta que una llamada corroboró lo que tanto se temía. La querida Mónica Spear, actriz y Miss Venezuela 2004, y su esposo habían sido asesinados. La información se regó como pólvora”.
Comenta Olavarrieta que sintió un golpe fuerte en la boca del estómago. Sin aire y con un dolor atrapado en el pecho soltó su primera palabra: “Maya”. El rostro de la pequeña hija de la pareja le vino a la mente con lágrimas.
La criatura, de 5 años de edad, no solo había sido sobreviviente del hecho, también fue testigo de la muerte de sus padres.
Este caso sanguinario colocó una vez más en el tapete la vulnerabilidad que viven nuestros niños frente a la agresión. Hechos que, a pesar de consternar y marcar la vida del país, se repiten sin obtener una solución eficaz y definitiva. El deterioro social causa sus estragos. El peligro que trae consigo esta ola de violencia es inminente.
Hablar de estas situaciones nos lleva a hacernos preguntas difíciles: ¿cuántos hijos presencian la muerte de sus padres en manos de la delicuencia?, ¿qué podemos hacer para evitar que la violencia en sus distintas formas (explotación infantil, hambre, abuso sexual, abandono y agresión) se siga repitiendo?, ¿cómo se puede ayudar a una persona que, en plena etapa de crecimiento, ha sido marcada por la inseguridad?”
Cecodap  gracias a la cooperación de la Unión Europea y Save The Children, se complace en presentar el libro, en el marco del aniversario del Día Internacional de los Derechos del Niño,   como otra forma de decirle al país, con una lectura amena y de fácil comprensión, que todas esas vidas arrancadas por la violencia deben permanecer en nuestra memoria para recordarnos que los niños y adolescentes son un corazón que late y clama por nuestra protección.
Según Pablo Neruda  “el amor  nace del recuerdo, vive de la inteligencia  y muere por el olvido”
La cita es para el día sábado, 24 de noviembre a las 9:30 am en el Salón Cónsul, Ambassador Suites Hotel, Av. Francisco de Miranda (frente al Centro Lido).
Será presentado  por Luis Olavarrieta (prologuista)
Hasta la próxima resonancia
@oscarmisle

No hay comentarios:

Publicar un comentario

VIOLENCIA. HAY QUE HABLAR CON LOS NIÑOS

  Óscar Misle Óscar Misle Los recientes enfrentamientos armados en la Cota 905 y comunidades aledañas y los operativos que se van realizan...